Informe político del Frente Guasú al Foro de São Paulo

Frente GuasuINFORME DEL FRENTE GUASU

LAS ELECCIONES DEL 21 DE ABRIL DE 2013 EN EL PARAGUAY

Asunción, 3 de mayo de 2013

 

1. EL GOLPE DE ESTADO, EL PROYECTO OLIGARQUICO TRANSNACIONALIZADO Y LA OFENSIVA DE LA DERECHA EN AMERICA LATINA.
Desde el vamos, es políticamente importante señalar el hecho de que las elecciones en el Paraguay se dieron en una situación de excepcionalidad, con todo el sistema electoral controlado por los sectores golpistas. El punto de partida de la legitimación de un proyecto político oligárquico en el Paraguay fue el Golpe de Estado del 22 de junio de 2012. El objetivo del Golpe fue desplazar al gobierno de Fernando Lugo y a las fuerzas democráticas progresistas y de izquierda del poder. La razón fundamental de este desplazamiento fue evitar por un lado, la consolidación de un proyecto que se perfilaba más allá del 2013, y, por otro, impedir todo proyecto político que, en términos inmediatos, pudiera poner en jaque la institucionalidad oligárquica tradicional.  
Asimismo el Golpe de Estado en el Paraguay debe ser aprehendido ante el giro que dio el proceso de integración en el MERCOSUR, dirigido por gobiernos progresistas y de izquierda. Este bloque pasó de un reagrupamiento netamente comercial, privatista y neoliberal, en sus orígenes, a la conformación de un bloque de naturaleza política, proyectado como parte de la integración latinoamericana. El Golpe de Estado fue también dirigido contra este tipo de proceso de integración que, de toda evidencia, no responde a los intereses de la oligarquía.
La manipulación de las elecciones fue la salida política del proyecto de la derecha paraguaya, que se inserta en un contexto de ofensiva regional contra todos los gobiernos progresistas y de izquierda y esencialmente para impedir el avance y profundización del proceso de integración de los pueblos latinoamericanos.
La importancia de estas elecciones es que el laboratorio de la reacción regional fue el Paraguay, después de los intentos fallidos de Golpes de Estado en Venezuela y Ecuador, de la política de desestabilización de la derecha en Bolivia, con un proyecto de escisión del Estado, y de las actuales ofensivas de la derecha en Venezuela, Argentina y otros países. Tal importancia reside en el hecho de que en la región se consolida un proyecto político de la derecha transnacionalizada y subordinada a los intereses de los Estados Unidos. La victoria de Peña Nieto en México, la conformación de la Alianza del Pacifico, incluyendo además a Colombia, Chile y Perú, confirma plenamente esta ofensiva, que pasaría hoy por la conformación de bloques afines a los designios norteamericanos, destinados a debilitar el proyecto de integración latinoamericana.
La participación del Frente Guasú en las elecciones celebradas el pasado 21 de abril se da en este contexto regional complejo.

 

2. LAS  ELECCIONES DEL 21 DE ABRIL: UN AVANCE POLITICO DEL CENTRO Y DE LA IZQUIERDA

A nivel parlamentario, en el 2008 el conjunto de los partidos de centro e izquierda que apoyaron la candidatura de Fernando Lugo (actualmente Frente Guasú, Avanza País, Partido Encuentro Nacional, Partido Democrático Popular y Movimiento Kuña Pyrenda), obtuvieron en total tres senadores, dos diputadas y un parlamentario para el MERCOSUR, lo que totaliza un numero de 6 Parlamentarios. Tal centro e izquierda en el 2008 participaron en forma totalmente fragmentada y globalmente obtuvo un 12%.
Dos partidos, actualmente miembros del Frente Guasú, el Partido Popular Tekojoja y el Partido País Solidario, obtuvieron en el 2008, dos senadurías y el Partido Participación Ciudadana, igualmente miembro del FG, obtuvo una diputación, en tanto que Tekojoja obtuvo un parlamentario del MERCOSUR.
En las elecciones del 2013 se puede constatar un crecimiento cuantitativo y cualitativo del mismo conjunto de centro e izquierda.
En los votos emitidos por los candidatos a la Presidencia de la República, de centro e izquierda, se obtuvo un total de 9,9 por ciento del total. El Frente Guasú, un total de 3,3% y Avanza País 5,7 por ciento.
En cuanto a diputados, el mismo grupo de partidos de centro e izquierda obtuvieron 18,3 por ciento (FG, PDP, AP, PEN y otros). El Frente Guasú totalizando 4,8 por ciento. La mayor cantidad de votos en diputados para el centro y la izquierda se explica porque hubo menos polarización que para la Presidencia de la República.
En senadurías, el centro y la izquierda obtuvieron un 27,6 por ciento, del cual el Frente Guasú obtuvo 9,6 por ciento y es la fuerza de izquierda más significativa (es la 3a fuerza en el Senado y, en general, por número de votos en general). Avanza País obtuvo un 5,0%. El PLRA obtuvo 24,4% para el senado. Por ello, las fuerzas de centro e izquierda, si actuaran unidas, pasarían a ser la segunda fuerza en el Senado, donde la polarización fue mínima y demuestra el potencial de este sector emergente. Hay que recordar que en el 2008, estas mismas fuerzas obtuvieron apenas un 12%, por lo que se puede decir que se más que duplicaron sus votos, en términos porcentuales, y se triplicaron en términos absolutos.
El total de numero de senadurías el centro y la izquierda totalizan 11 (2013), frente a tan sólo 3 en el 2008, en el caso de las mismas fuerzas.
De esta cifra,  5 senadores para el Frente Guasú, 2 senadores para Avanza País (escisión del Frente Guasú), el Partido Democrático Popular (centro) 3, sobrepasando a Avanza País y el Partido Encuentro Nacional (centro) 1 senador.
El número total de diputados es igual a 5, de los cuales, 1 para el Frente Guasú, 2 para Avanza País, ninguno para el PDP y 2 para el partido Encuentro Nacional.
En cuanto al PARLASUR, el único parlamentario electo de la izquierda fue del Frente Guasú, ninguno para las otras fuerzas.
El total de número de parlamentarios del centro y la izquierda totaliza 17 (en el 2008 6), de los cuales, 7 del Frente Guasú (en el 2008 4), 4 para Avanza País, 3 para el PDP y 3 para el PEN.
En cuanto a la representación en las Juntas Departamentales (el poder legislativo departamental), la proyección hasta el momento indica un número total de 16 elegidos. De entre esta cifra, 10 serian del Frente Guasú, 2 de Avanza País, ninguno para el PDP y 4 serian del Partido Encuentro Nacional.
Estas cifras a nivel parlamentario indican que el Frente Guasú logró posicionarse políticamente como una fuerza creíble, con un total de 33 parlamentarios (17 del Frente Guasú, claramente la 3a fuerza). Esto, con todas las dificultades que produjo la escisión del grupo Avanza País, el que  abandonó el proyecto unitario de izquierda.

 

3. EL ESPECTRO DE LA DERECHA

El gran perdedor de estas elecciones fue el Partido Liberal Radical Autentico, pieza clave en el Golpe de Estado contra el gobierno de Fernando Lugo en junio de 2012, así como los dos partidos de la (ultra) derecha no tradicional, UNACE y Patria Querida, que prácticamente se extinguen.
El PLRA no sólo perdió las elecciones sino que fue prácticamente repudiado, pues el actual gobierno usurpador de Federico Franco es asumido por este partido que anteriormente, fue aliado en co-gobierno en la Alianza Patriótica para el Cambio (APC), junto con la izquierda. Los resultados electorales para este partido liberal pueden ser considerados como catastróficos, pues perdió no sólo la presidencia –estando en el gobierno– sino casi todas las gobernaciones que estaban en su poder, así como una disminución notable del número de senadores y diputados.
Este partido puede ser considerado como el responsable principal de la ruptura democrática de junio de 2012 y de la vuelta al poder del Partido Colorado, que fuera desplazado por Fernando Lugo en el 2008.
El Partido Colorado prácticamente arrasó en las elecciones del 21 abril pasado.  Si bien tiene mayoría no calificada (la mitad más uno, pero no los 2/3) en la Cámara de Diputados, no obtuvo tal mayoría no calificada en la Cámara de Senadores, donde está en minoría (19 senadores sobre 45) que es la más importante políticamente.
El Frente Guasú, el centro y el resto de los partidos de izquierda, si logran coordinar una acción política conjunta a nivel parlamentario o al menos una agenda mínima de acuerdo sobre cuestiones sociales puntuales, pueden jugar en este escenario, un rol político fundamental.
En este contexto post-electoral, para el Frente Guasú y su representación parlamentaria, la coordinación permanente de las acciones con los movimientos sociales,  la puesta en marcha de una agenda social y política que responda a los intereses de los sectores populares, constituye el reto político más importante y una prioridad.
Desde el punto de vista político, las elecciones constituyeron no solo una salida política a la crisis que se planteó con la deslegitimación del gobierno golpista, sino, la salida política que legitima el proyecto oligárquico.
Este es un punto crucial para todos los movimientos y partidos políticos de izquierda, así como para el movimiento popular en la región y que merece una atención muy particular en la compleja situación regional, donde podemos constatar una reorganización de la derecha regional y una ofensiva dirigida desde el centro de poder hemisférico. El laboratorio Paraguay, proyecto de subordinación a los Estados Unidos, tuvo éxito.
En el plano regional el gobierno paraguayo golpista continúa bajo el régimen de sanciones decididas por la UNASUR y el MERCOSUR.
En la UNASUR, Paraguay se sumaría al bloque (no oficial) constituido por Chile, Colombia y Perú, miembros de la  Alianza del Pacifico.
Los gobiernos del MERCOSUR reconocieron la victoria de Horacio Cartes y del Partido Colorado, expresando deseos de una pronta reintegración al bloque.
La política que implementará el gobierno del Partido Colorado, tanto en el MERCOSUR como en la UNASUR, debe ser objeto de una atención particular, sobre todo en el contexto regional y en el proceso de integración.
 
 
4. LA SITUACION DEL FRENTE GUASU Y EL REPOSICIONAMIENTO COMO FUERZA DE IZQUIERDA.
Es un hecho, después de las elecciones celebradas el día 21 de abril pasado,  que el Frente Guasú es hoy una fuerza política de izquierda que no puede ser ignorada en el escenario político paraguayo. El Frente Guasú se encuentra en condiciones de consolidar un programa alternativo, capitalizar políticamente la coyuntura y proyectarse  como referencia política de los sectores populares en el Paraguay.
La participación del FG en estas elecciones se dio en condiciones muy difíciles. El Golpe de Estado del 22 de junio de 2012, la  situación de excepción creada para las elecciones destinadas a legitimar el proyecto golpista y anti-integracionista, la escisión que fuera provocada en las filas del proyecto unitario del Frente Guasú, el retraso en el inicio de la campaña, el boicot implementado por los medios de comunicación y por la derecha golpista, la competencia substancialmente desigual y desequilibrada con los otros sectores, son algunos de los hechos que hablan de una verdadera política de aislamiento por parte de los sectores de derecha en el Paraguay.
Este mismo boicot comunicacional y cerco mediático sanitario montado por la derecha golpista contra el Frente Guasú, fue  muy complaciente sin embargo con el sector de Avanza País, presentado como la “izquierda decente”, gozando de espacios privilegiados en todos los medios de comunicación.
A esto, hay que sumar otro factor político no menos importante, que fue la lectura errónea que se hiciera del proyecto unitario impulsado por el Frente Guasú y la no menos errónea comprensión política de las causas de la ruptura por parte del sector de Avanza País. Esta lectura errónea fue sustentada a nivel internacional por sectores de la dirigencia de algunos partidos  de la región.
El aislamiento al que fue sometido el Frente Guasú fue el resultado directo de esta lectura errónea.
Sobre esta comprensión errónea, se puso como premisa la exigencia de una UNIDAD ABSTRACTA del Frente Guasú con el sector rupturista de la unidad de la izquierda. Con ello, se perdió de vista el elemento esencial estratégico que es la legitimación del proyecto oligárquico y de los riesgos que implica la presencia de un gobierno subordinado a los intereses imperialistas,  en el seno mismo del MERCOSUR y de la UNASUR.
La responsabilidad directa de la división del proyecto unitario de la izquierda recae sobre la dirigencia de Avanza País, que rompió unilateralmente las negociaciones y con el proyecto del Frente Guasú. .
El Frente Guasú, considera que dentro de la coalición Avanza País, existen sectores que no necesariamente se identifican con la dirigencia que produjera la ruptura del proyecto unitario y que merecen un esfuerzo particular en pos de la reunificación de la izquierda y de las fuerzas progresistas. La UNIDAD  de la izquierda, que pasa por la reunificación de todas las fuerzas, es hoy un imperativo, una necesidad,  para la construcción  de una herramienta de emancipación y cambio social.
Mas allá de los aspectos cuantitativos mencionados, la calidad de la campaña electoral desplegada, materializada en los resultados logrados, hablan de la proyección de una inserción real a nivel nacional, de la construcción y consolidación de una herramienta política de referencia unitaria (el Frente Guasú) y de la conciencia política  de la construcción de un proyecto  alternativo claramente de izquierda.  Si bien
El FG resistió, adquiriendo una proyección nacional como fuerza política que ya no puede ser ignorada. La derrota esperada por la derecha oligárquica que debía traducirse en la desaparición de todo proyecto de cambio, no se produjo.
El desplazamiento político resultado del Golpe de Estado de 2012, no dio los resultados esperados por los sectores golpistas que, apostaron al debilitamiento, o incluso a la desaparición del Frente Guasú como fuerza política. A pesar de la división que fuera ocasionada por Avanza País, el Frente Guasú posee hoy una inserción de carácter nacional, es la 3a fuerza político por votos y cantidad de parlamentarios y, además, posee una aceptación política, como herramienta de construcción de las expectativas populares.
Más allá del abordaje puramente cuantitativo de los resultados electorales, de la cantidad de representantes en varios niveles, el FG aparece y se posiciona como la fuerza nacionalmente emergente, de izquierda y progresista, de cambio social.
Queda como tarea post electoral, desplegar un esfuerzo serio y constante a favor de la reunificación de las fuerzas de izquierda y de los sectores fuerzas progresistas.
Frente Guasú (FG)
Partido Popular Tekojoja (PPT), Partido del Movimiento Patriótico para el Cambio (PMPP), Partido Frente Amplio (PFA), Partido Comunista Paraguayo (PCP), Partido de la Unidad Popular (PUP), Partido Convergencia Popular Socialista (PCPS),Partido de la Participación Ciudadana (PPC) y el Partido País Solidario (PPS).